Cómo elegir el mejor perfume de mujer para tu aroma característico

20 DE JUNIO DE 2023

Encontrar el perfume adecuado para ti puede ser todo un reto, pero también muy gratificante, ya que te ayudará a transmitir tu esencia a un sentido que se relaciona directamente con la memoria. Consulta estos consejos para descubrir el aroma perfecto por el que los demás te recordarán.

Llevar un perfume no es lo mismo que tener un aroma. A la hora de comprar un perfume de mujer, solemos optar por el que más nos llama la atención a primera vista, pero puede que no nos tomemos el tiempo de buscar el que realmente nos define y define nuestra esencia. ¿Es eso posible?

Estamos aquí para demostrártelo. Con la información adecuada y algunos consejos útiles, podrás descubrir cuál es el mejor perfume de mujer para ti y tener la fragancia que mejor se adapta a ti. Profundicemos en el mundo de los aromas.

El espectro de los aromas

Un buen comienzo para encontrar el perfume adecuado para ti es conocer los diferentes tipos de fragancias, sus características y derivados. No es necesario que domines estos conocimientos: basta con tener una idea general de qué familias de fragancias existen y qué percepciones se relacionan con cada una de ellas, ya que te será de gran ayuda para poder "leer" un perfume.

Hay cuatro tipos principales de fragancias, y cada efecto se produce mediante una combinación de diferentes aromas:

Las fragancias frescas suelen incluir notas cítricas, acuáticas y verdes. Su aroma suele ser refrescante y energizante, suave al olfato y estimulante. El limón, el pomelo o la bergamota ofrecen distintas intensidades de cítricos, mientras que la hierbabuena o el eucalipto pueden identificarse como notas verdes, y las notas acuáticas transmiten sensaciones marinas y acuáticas.

Los aromas florales son muy populares en los perfumes femeninos, ya que evocan el olor fresco y dulce de las flores, y en ocasiones de las frutas. La familia floral es la más amplia de ellas, con notas que van de suaves a intensas, y una amplia gama de aromas florales como lavanda, rosa, jazmín, lirios o árbol de té, por nombrar algunos.

Las fragancias orientales son cálidas y especiadas. Se perciben como perfumes dulces y embriagadores que recuerdan la opulencia y el lujo de los tiempos antiguos. Los aromas orientales pueden percibirse como vainilla, cardamomo o canela, aunque también se pueden encontrar dentro de esta familia aromas florales-orientales como orquídeas o azahares, o aromas amaderados-orientales como mirra o sándalo.

Los aromas amaderados son versátiles y duraderos, y ofrecen profundidad con olores a madera que pueden ser secos y ahumados como el cedro o el incienso, musgosos y terrosos como el ámbar o el pachulí, o incluso complejos como el vetiver, tan ricos en sabor que pueden ser difíciles de describir. Los perfumes amaderados a menudo se asocian con el misterio y la fascinación.

Un viaje de fragancias

Un buen perfume de mujer suele desplegar el carácter de su aroma en tres etapas: una nota de salida, una nota media y una nota de base. La nota de salida o de apertura es la que se percibe inmediatamente después de rociar el perfume. Ese aroma desaparece rápidamente, pero sirve como transición para que surja el corazón de la fragancia.

El ingrediente dominante determina la categoría del aroma, haciéndolo fácilmente reconocible dentro del espectro, y debe estar presente en todas las etapas en diferentes niveles. Por ejemplo, si notas una fuerte presencia de vainilla en el perfume, probablemente ese sea su ingrediente dominante.

El acorde es la columna vertebral de la fragancia, la nota que se encuentra debajo y permanecerá como la coda de tu perfume. Es importante que esta nota final también sea atractiva para tus propios sentidos, ya que permanecerá en tu piel después de que uses el perfume por primera vez. Por lo tanto, cuando busques tu aroma característico, tómate un momento para dejar que la nota de base florezca después de probar el perfume.

Combinación de aromas

Los perfumes para mujeres probablemente estén compuestos por una combinación de familias de fragancias que pueden identificarse a través del recorrido olfativo descrito anteriormente. Los aromas más suaves suelen colocarse como notas altas en una mezcla de fragancias, mientras que los aromas más pesados ​​se percibirán en la base.

Los aromas cítricos son una excelente combinación con fragancias frutales o florales para agregar ligereza o cortar la dulzura; los aromas florales pueden aprovechar la pesadez de los tonos medios o base, y los aromas amaderados u orientales generalmente se colocan como notas base por su profundidad que realza la esencia de la mezcla.

Algunos consejos más

El mundo de los aromas es complejo, por lo que te recomendamos que sigas tus sentidos a la hora de interpretar un perfume. Identificar las notas y las familias de fragancias te servirá de guía, pero experimentar cómo te hace sentir un perfume y visualizar lo que te recuerda a nivel personal es igual de importante.

Al probar un perfume, intenta pensar en palabras que te acerquen a su esencia general. ¿La fragancia te resulta delicada, exótica, ácida, suave, potente, rara? ¿Es sugerente, penetrante, persistente? ¿Te llama la atención, te confunde, te brinda alegría o te hace reflexionar?

Tener un perfume que te identifique es una excelente manera de reflejar tu personalidad y dejar una impresión duradera. Encontrar tu aroma característico puede darte una sensación de empoderamiento y singularidad que aumentará tu confianza y que sin duda los demás notarán.

Ahora que ya conoces los conceptos básicos del perfume, emprende el viaje para encontrar el tuyo con Yodeyma.